Boris Christoff

El otro Boris Christoff (1914-1993) no fue un astrólogo, como el que tuvimos por estos lares, sino que fue un bajo de ópera búlgaro, uno de los grandes bajos del siglo XX pertenecientes a la tradición eslava.Su voz, particularmente amplia y melodiosa, le valió tal admiración que, en 1942, el Estado Búlgaro le propuso una beca de estudios para que estudiase canto y perfeccionase su arte en Italia, con el legendario barítono Riccardo Stracciari. El Rey Boris III de Bulgaria, impresionado por su voz, le aconsejó con cierto humor: "¡Tenemos demasiados juristas en este país, pero no suficientes cantantes!" Después de actuar en diversos recitales en Austria, en 1944 fue obligado por los nazis a enrolarse en sus filas; pero, como Christoff se negó, fue internado en un campo de concentración. Llegada la liberación y el fin de la guerra, en 1945, hizo su debut en la Academia de Santa Cecilia romana en recital y en Reggio Calabria como Colline en La bohème en 1946. Dejó un importante legado discográfico, en el que se incluye la edición completa de las 63 canciones de Mussorsky y dos versiones de la ópera "Borís Godunov", interpretando en una de ellas los tres papeles de bajo de la ópera. Murió un día como hoy. La última vez que cantó en su país, fue en 1945.